Caravaggio. Un fugitivo en Malta
Si Malta es tu próximo destino, debes saber que hace poco más de 400 años el Gran Maestre de la pintura Michelangelo Merisi da Caravaggio estuvo pisando la isla. Nuestro protagonista de hoy pertenece al barroco italiano y destaca por su ajetreada vida llena de polémicas. Dejó una huella imborrable no sólo por su arte sino también por su actitud extravagante que queda reflejada en el gigantesco cuadro de la Concatedral de San Juan de La Valeta.
El cuadro, titulado La decapitación de San Juan Bautista, es el más grande de su carrera. El artista refleja un momento violento como es la decapitación, con siete figuras a tamaño real, y al fondo se puede observar el detalle de un patio interior de ejecuciones. La intención claramente era conmover al espectador.
Caravaggio llegó a Malta en junio del 1607 fugado de Roma por homicidio. Su primer paso fue retratar a un caballero de la Orden de San Juan llamado Alof de Wignacourt a través de su técnica óleo sobre lienzo, cuyo cuadro se conserva hoy en el museo Louvre de París.
Justo después empezó a pintar La decapitación de San Juan Bautista, obra que terminaría el año 1608. Caravaggio tenía un gran interés en entrar en la Orden de Malta, pero había algunas condiciones que él no cumplía, como por ejemplo el hecho de no ser religioso y las habladurías sobre su asesinato en Roma. Por ello el artista sabía que no le iba a ser fácil entrar en la orden, y usó la gran pintura como pago para poder entrar en ella, ya que al ser su sueño haría cualquier cosa por conseguirlo.
Finalmente, el 14 de junio de 1608, era investido caballero con todos los honores, y una de las prohibiciones como tal era la de no poder salir de la isla sin permiso.
Al poco tiempo le acusaron sin pruebas contundentes de haber herido gravemente a otro miembro de la orden y acabó en la cárcel, momento en que tenía lugar la inauguración del gran cuadro en la Concatedral. Caravaggio acabó escapando de prisión, seguramente con alguna ayuda exterior, y apareció en Siracusa (Sicilia) donde sus problemas no terminaron hasta su solitaria muerte por fiebre el año 1610 en un pueblo de la Toscana.
No olvidéis visitar la impresionante Concatedral de La Valetta para ver esta gran obra llena de historia y belleza.
Os animamos a que salgáis a buscar las historias y misterios de la isla de Malta.